Nuestro buque insignia fue el protagonista de un día espectacular. Los pasajeros fueron recibidos con un delicioso y refinado aperitivo firmado por el chef Bruno Barbieri, y las luces del teatro se iluminaron para disfrutar de actuaciones acrobáticas de grandes artistas internacionales que dejaron al público sin aliento.
Pero no solo hubo celebraciones, también muchas emociones: presenciar el ritual de la ceremonia del bautizo con nuestra excepcional madrina, Penélope Cruz, rompiendo una botella en la proa del barco para bendecirlo fue un momento inolvidable.
Costa Smeralda demostró ser sinónimo de celebración y alegría. El cielo de Savona se iluminó con mil colores gracias a los espectaculares fuegos artificiales, los asistentes no podían apartar la vista del cielo. Costa Smeralda retomó así su viaje por los lugares más bellos del Mediterráneo.
El bautizo fue un emocionante momento para Costa Smeralda